Vistas de página en total

Translate

domingo, 17 de agosto de 2008

Las tropas rusas dejarán a partir de mañana la zona de conflicto en el Cáucaso


12:58 El anuncio del presidente Dmitri Medvedev coincide con la visita de la canciller alemana, Angela Merkel, a Tbilisi
Tbilisi/Moscú (DPA) - El presidente ruso, Dmitri Medvedev, anunció hoy que a partir de mañana lunes comenzará la retirada de las tropas rusas de la zona en conflicto en el sur del Cáucaso, coincidiendo con una visita de la canciller alemana, Angela Merkel, a Tbilisi, para reunirse con su homólogo georgiano, Mijail Saakashvili.
Medvedev matizó que se refiere a las tropas que reforzaron la labor de las unidades de pacificación rusas durante la ofensiva reciente en Georgia, dijo durante una conversación telefónica con su homólogo francés, Nicolas Sarkozy, citado por la agencia Interfax. Se calcula que más de 10.000 soldados rusos permanecen en terreno georgiano y en Osetia del Sur.
Mientras tanto, desde Tbilisi, la canciller alemana reiteró también su exigencia a Rusia de que retire sus tropas de las zonas ocupadas en el territorio georgiano. "Esperamos señales y no en semanas, sino en días", apeló. La canciller repitió la postura expresada también el sábado por el presidente estadounidense, George W. Bush, en la exigencia de retirar las tropas "rápidamente y sin retraso". El mundo entero espera la retirada, añadió Merkel.
Durante la conversación telefónica con Medvedev, Sarkozy advirtió que si Rusia no implanta "rápida y completamente" el acuerdo de retirada de tropas, su acción tendrá "duras consecuencias para las relaciones entre Rusia y la Unión Europea".
Medvedev aseguró que la retirada comenzará el lunes alrededor del mediodía, informó por su parte la emisora de noticias francesa France Info. Esta mañana el jefe del estado mayor ruso había dicho que no se tomaría una decisión sobre la retirada de las unidades de la división 58 y las tropas aéreas hasta que la situación en el país no estuviera estabilizada.
Medvedev habló también con Sarkozy sobre la implementación del plan de seis puntos elaborado con ayuda de Francia para poner fin al conflicto en el Caúcaso. El mandatario ruso firmó el sábado el acuerdo, que permite a los soldados rusos patrullar fuera de las fronteras de Osetia del Sur, pero sólo "en las cercanías inmediatas de Osetia del Sur y en ninguna forma en todo el territorio georgiano", explicó Sarkozy.
Según datos desde París, los presidentes acordaron también el envío lo antes posibles de observadores internacionales de la Organización para la Seguridad y al Cooperación Europea (OSCE).
Merkel también defendió el estacionamiento de tropas de paz internacionales rápidamente en las que Alemania y la Unión Europea estarían dispuestas a participar. Saakashvili, por su parte, pidió que observadores internacionales controlen la anunciada retirada de las tropas rusas. Georgia no acepta tropas de paz rusas "porque fueron parte del conflicto".
Además, Merkel destacó la soberanía de Georgia y defendió su futura entrada en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). "Georgia será, si quiere, miembro de la OTAN", y Alemania no ve motivo para desviarse de la decisión de la última cumbre de la alianza atlántica en Bucarest.
Moscú rechaza estrictamente la admisión del país caucásico en la OTAN. La organización atlántica rechazó precisamente un calendario para la entrada de Georgia en abril por los conflictos latentes en Abjazia y Osetia del sur.
Merkel propuso también encuentro de la Unión Europa con Georgia y los Estados caucásicos vecinos. "Tenemos buenos motivos para intensificar la política de vecindad de la UE con Georgia y países como Azerbaiyán, Turkmenistán y Armenia", explicó.
Ahora es importante mirar hacia adelante y no realizar investigaciones "eternas" sobre las causas del conflicto. Además, deben hacerse todos los esfuerzos posibles para que la ayuda humanitaria llegue rápidamente a los afectados, reclamó.
Por su parte, el mandatario georgiano exigió ayuda internacional para solucionar la crisis del Cáucaso. Hay miles de refugiados que se ven amenazados por "limpiezas étnicas", aseguró. "El mundo no puede permitirlo", dijo Saakashvili.
En Tbilisi se esperaba hoy la llegada del presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Jakob Kellenberger, para hablar con representantes del gobierno georgiano y ruso sobre la situación humanitaria de los refugiados en el Cáucaso y para ofrecer más ayuda. Hoy está prevista una reunión con Saakashvili y el martes con el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, informó la organización en Ginebra.
Mientras tanto, la situación en el terreno seguía siendo convulsa este fin de semana. La organización defensora de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW) habló de represalias de milicianos surosetas contra civiles georgianos en la ciudad de Gori. HRW exigió a las fuerzas rusas que garanticen la protección de refugiados georgianos. La ONU calcula que en el territorio georgiano casi 90.000 personas que perdieron sus casas necesitan ser abastecidas.
Según testigos, las tropas rusas controlaban este fin de semana en Georgia las conexiones de carreteras más importantes de la capital Tbilisi a la ciudad de Gori, en el noroeste del país. También en la ciudad occidental de Senaki a unos 50 kilómetros del Mar Negro, unidades rusas continuaban en sus puestos.
El gobierno georgiano responsabilizó a Rusia de destruir constantemente infraestructura civil y militar en el país, algo que Moscú calificó de "mentiras".
Mientras, el Estado mayor en Moscú confirmó la ocupación de la principal central hidráulica de Georgia situada en el río Inguri, en la región fronteriza con la secesionista república de Abjazia, justificando que así asegurarán el suministro de electricidad en decenas de miles de hogares de Georgia y Abjazia.

No hay comentarios: