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domingo, 7 de septiembre de 2008

Agresivas y millonarias compras

Árabes "ponen sus fichas" en edificios ícono de EE.UU.


La venta de los edificios Chrysler y General Motors refleja cómo están moviendo sus fichas los fondos árabes, aprovechando la "venta de garaje" que supuso la crisis subprime.


(El Mercurio-Santiago)Desde mediados de junio que la joya del art decó de la "Gran Manzana", el edificio Chrysler, pertenece al Consejo de Inversión de Abu Dhabi, un ente gubernamental de los Emiratos Árabes Unidos.Esta movida inmobiliaria del Chrysler fue avaluada en 800 o US$ 900 millones (las cifras no son oficiales) y causó conmoción en los medios de comunicación y en blogs privados de Estados Unidos, porque fue la segunda del mercado de las propiedades en menos de un mes.Semanas antes, un joint venture entre Boston Properties -una empresa norteamericana que maneja activos de oficinas top en las principales ciudades de Estados Unidos- y dos fondos con capitales "petroleros" compró el rascacielos más caro de Nueva York, el edificio General Motors (GM), por la friolera de US$ 2.800 millones. Los fondos "petroleros" estaban formados por Meraas Capital -un fondo de inversión privado de Dubai-, y otro fondo cuya propiedad pertenece a los gobiernos de Kuwait y Qatar, administrado por Goldman Sachs.El edificio de GM está en la Quinta Avenida, mira al Central Park, y es el único de la ciudad que ocupa una cuadra completa. Es reconocido mundialmente porque en su primer piso está la juguetería FAO Schwartz y la nueva Apple Store, con su pirámide de cristal en la entrada, similar a la del Louvre.La compra del edificio GM también incluyó la adquisición de otros tres edificios en la ciudad, que eran del mismo dueño y que estaban avaluados en total en más de US$ 1.000 millones.Los cuatro edificios juntos implicaron un desembolso de casi US$ 4.000 millones en menos de un mes.Una de las razones que explican la inversión en estos edificios es porque los rascacielos de oficinas emblemáticos de Nueva York son activos claves, y su precio debiera aumentar en el tiempo. Por ello, analistas inmobiliarios aseguran que difícilmente estos fondos habrían podido comprar estos activos en otra oportunidad."Nosotros les mandamos nuestro dinero a cambio de petróleo, y ese dinero vuelve y se compra nuestros activos", le dijo Dan Fasulo, un analista norteamericano de Real Capital, a la agencia de noticias e información de los Emiratos Árabes.Opiniones globalesLa prensa mundial ha seguido atentamente estos movimientos, y sobre éstas y otras compras el sitio web medial de los Emiratos Árabes dice: "Abu Dhabi, Kuwait y otros países del Golfo ricos con las utilidades del petróleo han tomado ventaja de los precios a la baja y han invertido en inversiones inmobiliarias y financieras alrededor del mundo".De hecho, sólo Abu Dhabi ha invertido más de US$ 5.000 millones en los últimos siete años en adquisiciones.Por esto, ser percibidos como arrogantes es algo que preocupa al Sheik Ahmed bin Zayed Al Nahyan, que maneja el fondo de Abu Dhabi, junto a otros 11 expertos en inversiones globales.Cuando en noviembre del año pasado decidieron comprar el 4,9% de Citigroup y convertirse en el principal accionista de la entidad, se mostró preocupado por el tema y sólo aprobó el plan de US$ 7.500 millones cuando le demostraron que no sería así.Ante el gran movimiento de fichas inmobiliarias, algunos dicen que el Congreso de EE.UU. podría estudiar el tema, pero no hay nada claro.Asiáticos entrarían a empresas como GEEstos grandes edificios estadounidenses no son lo único que ha salido en venta tras la crisis crediticia (o subprime), ya que capitales europeos y asiáticos han entrado de lleno a otros sectores de marcas fuertes y muy identificadas con la historia industrial norteamericana.La compra de Anheuser-Busch (Budweiser) en US$ 52.000 millones por la también gigante belga-brasileña InBev fue una de las más dolorosas, e incluso algunos fanáticos cerveceros de Missouri dijeron que por tal motivo no la tomarían nunca más.Otro de los puntos conflictivos para el orgullo norteamericano es la probable venta de la reconocida línea de electrodomésticos de General Electric (GE) por una suma de entre 3.000 millones y US$ 8.000 millones a dos asiáticas: la china Haier o a la coreana LG.Pero hay más negocios en curso, como por ejemplo el de la farmacéutica suiza Roche Holding, que quiere pagar US$ 44.000 millones por el 44% de la compañía biotecnológica Genentech y así convertirse en el único dueño de esa compañía.

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