El dólar “ha secuestrado” al mundo

Las elecciones presidenciales estadounidenses se realizarán pronto en medio de la crisis financiera. En la campaña electoral, Barack Obama se pronuncia principalmente por el “cambio” y parece que su ímpetu prevalece sobre John MaCain, tradicional y ampliamente respetado.Hablando en general, frente a una grave crisis, suele haber dos tendencias psicológicas, “buscar cambio” y “buscar seguridad”. Los resultados de las elecciones presidenciales estadounidenses dependerán del crecimiento o debilitamiento de estas dos tendencias en los últimos momentos.La situación que enfrenta actualmente Estados Unidos se parece en algo a la que enfrentó Roosevelt en su época. En aquel entonces, Roosevelt enfrentaba dos opciones importantes: Enfrentar la depresión económica después de la crisis financiera y tomar decisión sobre una opción de guerra internacional. Hoy día, el nuevo presidente también enfrentará dos opciones importantes: La primera es decidir la política y forma para restaurar la economía estadounidense; y la otra, decidir la forma y modo de la “guerra antiterrorista” de los Estados Unidos. Estas nuevas elecciones presidenciales también simbolizan, tal vez, una opción por el cambio social, una opción por los valores y ética sociales, una opción por la política y moral sobre la solución de los problemas sociales como la pobreza y la raza.Los dos candidatos presidenciales estadounidenses buscan mantener la posición líder de EEUU en el mundo y ambos declaran que representan los valores e intereses de EEUU. Pero, después de todo, ellos representan los diferentes reclamos sociales dentro de los Estados Unidos y enfrentan el difícil problema de “cómo actuar”.Para el mundo, la gente presta mayor atención a si tambalea la posición predominante del dólar en el mundo y si va a decaer la posición estadounidense de “única superpotencia” como señor del mundo.En los últimos 20 años, la configuración de la balanza internacional de pagos global es: Los países de Asia Oriental exportan mercancías físicas, los países abundantes en recursos naturales exportan éstos en tanto que EEUU exporta productos en dólar de la industria financiera a cambio de mercancías y recursos naturales. El déficit estadounidense en la balanza internacional de pagos ha venido ampliándose constantemente, sus deudas internas y externas han venido acumulándose en forma incesante y la expansión del crédito del dólar ha sido obvia. La actual crisis financiera es el colapso de esta configuración irrazonable y el dólar muestra una obvia pérdida de crédito. Pero por otro lado, muchos países del mundo ya han establecido en las pasadas actividades económicas vínculos de intereses con el dólar, en que cuando el uno está dañado, los otros también, de modo que es difícil que ellos permanezcan con los brazos cruzados ante el colapso del dólar. En segundo lugar, las demás monedas del mundo no tienen actualmente capacidad de sustituir el dólar. En cierto sentido, el dólar “ha secuestrado” al mundo y, en un determinado lapso en el futuro, el dólar mantendrá su posición predominante aunque tiende a debilitarse. No obstante, a juzgar por largo tiempo, Estados Unidos y los otros países del mundo enfrentan un reajuste doloroso, porque ya se ha demostrado que no puede perdurar más la configuración de la balanza internacional de pagos del pasado.El dólar tendrá que retornar a la realidad, Estados Unidos tendrá que retornar a la realidad: Esto será lo que debe hacer el nuevo dirigente estadounidense. Para Estados Unidos, la “contracción” en cierto sentido será inevitable, aunque esto será tal vez un dolor psicológico. La política es un arte de “actuar”; para un dirigente político, decir palabras altisonantes sin viabilidad y hacer cosas importantes sin capacidad para ello será un error fatal. (Pueblo en Línea)31/10/2008